Atronadores decibelios, chirriantes alaridos, infernales riffs, coplas infractoras de varias leyes...en definitiva, buena música.

miércoles, 1 de agosto de 2012

DISCOS QUE TENGO TIRADOS POR AHÍ (LXII): GUNS N' ROSES - APPETITE FOR DESTRUCTION (1987)



Ayer, unos cuantos intrépidos dirigidos por el amigo Don Hyundai, que se conocía el camino, al volante, nos aventuramos a ir a cenar a un restaurante de temática rockera del que habíamos oído hablar. Por las referencias el sitio prometía rock y carne a raudales, algo demasiado jugoso para un rockero carnívoro como es un servidor.  No culparía del todo a las expectativas que nos habíamos hecho los presentes, pero la experiencia total no fue tan satisfactoria, a saber: una ambientación cojonuda y una carta bastante suculenta, sí, pero no es de recibo que un sitio con los nombres ZZ Top, Lynyrd Skynyrd, Thin Lizzy, The Doors y demás bien grandes en la puerta te casquen de banda sonora a Marilyn Manson y Amy Winehouse, no se si es que fuimos el día equivocado.

Lo mejor, una hamburguesa más que decente de la que di buena cuenta llamada Guns N' Roses que satisfizo  mis apetitos carnívoros, lástima que no los rockeros, así pues, acudimos una vez más a la banda norteamericana para saciar el apetito musical, y es que estos tíos sabían de apetitos como bien demuestra su archiconocida obra maestra Appetite For Destruction. Disco que no necesita presentación ninguna habida cuenta de los ríos de tinta y pixels que se han escrito sobre él desde que se publicara en aquel 1987 pero que también es la dolorosa constatación de que los Guns N' Roses, una banda que contaba con un potencial inusitado, no ha hecho (ni hará jamás, qué duda cabe) algo mejor en su vida. Si me apuran, incluso podríamos decir que es un grupo que roza el one hit wonder discográfico pues si bien podemos encontrar entre su breve discografía algo de interés lo cierto es que Appetite For Destruction es demasiado grande como para eclipsar toda la vida y obra del grupo. ¡Y se trata de su debut!

Pero centrándonos en sus virtudes, que no escasean, hay que decir que es un disco de hard rock absolutamente redondo y perfecto, con una formación funcionando como el mejor de los engranajes compuesta por Steve Adler a las baquetas, Duff McKagan al bajo, el cerebro en la sombra Izzy Stradlin a las rítmicas, el virtuoso Slash poniéndolo todo patas abajo con su Les Paul y el Axl Rose de siempre pero con menos tonterías (tampoco creo que muchas menos), menos kilos (todavía no se comía los bollicaos como picos el buen hombre, vaya "appetite" que cogió el hombre) y mejor voz. Con esta materia prima y su excelente producción, así salieron los doce temazos que dan forma al álbum.

Welcome To The Jungle, himno reconocido por todos sirve de pistoletazo de salida, que continúa con It's So Easy, macarra y vacilón como ellos mismos. Nightrain es otro tema emblema de este trabajo, siempre con el riff como motor y como insignia, más o menos lo mismo que Out Ta Get Me, más asalvajado aún, con su punto de arrogancia en las voces y unas guitarras sobresalientes. Rock mayúsculo, vamos.

Y seguimos, ahora con un tema dedicado a "eso que fuman los moros", la genial Mr. Bronwstone, auténtico rock duro y pesado americano en otra dimensión distinta a la de aquellos grupos que escaparon de los 70 y querían seguir en la brecha (Aerosmith, verbigracia). Paradise City creo recordar que fue mi primer tema de los Guns y aún le sigo teniendo un cariño especial, también me sigue pareciendo un tema perfecto, por sus contrastes (sofisticación y contundencia, guitarras y sintetizadores, partes lentas y rápidas) y, cómo no, le maestro Slash corriendo arriba y abajo del mástil que sigue recordándome quién es un titán y quien un rascacuerdas. Más hard rock callejero y con actitud con My Michelle, historias reales como aquellas que tantos grupos de la época consiguieron convertir en parodias pero que aquí nos convencen, y mucho ojo con el trabajo de Izzy en este tema.

Otro de mis preferidos no tan conocidos: Think About You. Adoro todo de este tema y ese estribillo arpegiado, amen de ser otra lección de rock que conviene repasar una y otra vez. Caso distinto es el de la sobadísima Sweet Child O' Mine que sigue siendo un temazo pero que en cuanto se vio su potencial comercial ha sido víctima de la sobre exposición por parte de distintos medios. Un estupendo y a toda leche You're Crazy precede a otra joyita como es Anything Goes, seguida de un gran final en forma de Rocket Queen, otro magnífico riff con grabación de fornicio incluída como base a la historia de una personaje de la escena, amiga de Axl.

Mencionábamos antes la producción y he de decir que me encanta, sonando como quizás debían sonar todas las bandas que iba en esta onda. Me encanta como suena cada cencerro de la batería, los solos, el bajo, las guitarras con chorus...sin que suene para nada sobrecargado, pero claro, hablamos de un disco que todos debéis de haber escuchado, ¿no?

Así pues, os dejo con los Guns, que tanto Appetite y ya va siendo hora de papear. No solo de riffs vive el hombre.

Keep on rockin'!

GUNS N' ROSES - APPETITE FOR DESTRUCTION

1."Welcome to the Jungle"  
2."It's So Easy"  
3."Nightrain"  
4."Out ta Get Me"  
5."Mr. Brownstone"  
6."Paradise City"  
7."My Michelle"  
8."Think About You"  
9."Sweet Child o' Mine"  
10."You're Crazy"  
11."Anything Goes"  
12."Rocket Queen"




3 comentarios:

  1. Los Use Your illusion también son joyas, obras maestras del hardrock de nuestras vidas!!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Lo de obra maestra les queda un poco grande a mi parecer, sobre todo cuando ese apelativo sí que se le puede aplicar (y se aplica) al Appetite. Sí, las comparaciones serán odiosas pero es que no hay color.

      Eliminar
  2. ¡Qué decir del mejor disco de hard rock de la historia!

    ResponderEliminar