Atronadores decibelios, chirriantes alaridos, infernales riffs, coplas infractoras de varias leyes...en definitiva, buena música.

viernes, 28 de diciembre de 2012

DISCOS QUE TENGO TIRADOS POR AHÍ: JUNCO - HOLA, MI AMOR



No podíamos terminar el año sin hacer mención a un galán como pocos quedan, todo un rocker de la balada gitana con sangre de reyes, the one and only Ricardo Gabarre aka Junco y su bellísimo Hola, Mi Amor. Discazo imposible de definir pues, ¿quién puede medir en palabras sentimientos tan profundos? Pues quizás sea el señor Junco quien lo haga, como atestiguan Celos o la propia Hola, Mi Amor.

Si pensabas que no había epítome de lo romántico mayor que Robert Plant cantando Thank You, debo pedirte que abras ojos y orejas, amigo lector, y que te dejes cautivar por la magia zíngara de este mostachudo trovador quien lleva ya unos años sin prodigarse demasiado. Esperemos que en este 2013 que se nos viene encima entre con renovados ánimos y nos vuelva del revés como solo él sabe hacer. Estamos contigo, Junco!

jueves, 27 de diciembre de 2012

DISCOS QUE TENGO TIRADOS POR AHÍ (XCVIII): BONAFIDE - ULTIMATE REBEL (2012)



Vamos cerrando ya el año y si bien nunca he sido muy de listas y rankings sí es justo hacer mención a algunos de aquellos discos que me han vuelto del revés a lo largo de este año, pues echando un vistazo a todos estos meses la verdad es que la cosecha no ha estado nada mal en cuanto a cantidad y calidad. Uno de estos álbumes del año sin duda es esta joya de los suecos Bonafide llamada Ultimate Rebel, uno de tantísimos grupos de esa tradición rockera escandinava que tan buenas bandas nos ha dado y que viene dispuesto a pelear por su posición en lo más alto con uñas y dientes. Al igual que tantos paisanos, Bonafide apuestan por el rock mayúsculo y peleón según el evangelio de AC/DC, con los amplificadores al 11 y mucha rabia en una producción que me resulta una jodida maravilla, con un sonido muy, muy, muy guitarrero donde se escucha hasta el cambio de pastillas pero que al mismo tiempo recoge perfectamente los matices y la elegancia que llegan a tener estos suecos.

Al timón encontramos a Pontus Snibb, tremendo guitarrista y vocalista amén de animal de directo como pudimos comprobar hace no mucho en el Serie Z, acompañado de un magnífico Mikael Fässberg compartiendo labores guitarreras, el mega-sleazy bajista Martin Ekelund y un pedazo de salvaje a las baquetas llamado Niklas Matsson al que imagino que para la grabación de este disco hubo que sedarlo y ponerle una camisa de fuerza, porque en directo arreaba y lanzaba baquetas que era un peligro público.

Hechas las presentaciones ya solo nos queda entregarnos a los brazos del dios Rock para que nos zarandee,  nos de la vuelta e incluso nos abofetee, porque eso es lo que vamos a encontrar en Ultimate Rebel nada más empezar los primeros compases de Make My Own Rules, avisados quedan también de que no dudan en incrementar el nivel de caña como en la estupenda The Mess o mostrarnos que son unos tíos con clase y que el hecho de que en concierto Mikael llevara una camiseta del Jailbreak de los bienamados Thin Lizzy era de todo menos casual. Y así seguimos en esta travesía rockera con la muy animosa Doing The Pretty, divertida y con unas baterías muy Bonham, y la macarrísima Blue Skies Red. Si los fans del sonido escandinavo aún albergan dudas al respecto, Rough Cut las disipará inmediatamente y para los que se aferren más a los AC/DC de toda la vida les ocurrirá lo mismo con Rag And Bone Man, ambos temas cojonudísimos.

I Want Out es la juerga, el tema perfecto para berrear cerveza en mano, no muy distinta de la gran Pick A Window (You're Leaving), más macarreo con la mirada fija en los gurús australianos, y para cerrar el chiringuito pues nada mejor que un contundente y directo Rebel Machine a golpe de riff. Esto es rock'n'roll y no cualquier cosa que les vendan por ahí.

Grupo que a buen seguro seguirá teniendo mucho que decir y que nosotros esperaremos ansiosos, pues como ya comentamos en su día, bien que los disfrutamos en el Z tanto en el escenario como después, pues resultaron ser unos tíos enormemente simpáticos. Incluyo aquí un par de imagenes para nuestro Hall of Fame.



Keep on rockin'!

BONAFIDE - ULTIMATE REBEL (2012)

01. Make My Own Rules 
02. The Mess 
03. Too Fired Up 
04. Doing the Pretty 
05. Blue Skies Red 
06. Rough Cut 
07. Rag and Bone Man 
08. I Want Out 
09. Pick a Window (You're Leaving) 
10. Rebel Machine



viernes, 21 de diciembre de 2012

DISCOS QUE TENGO TIRADOS POR AHÍ (XCVII): SEPULTURA - CHAOS A.D. (1993)



Desde hace dos días mucha gente me pregunta que qué me parece que "un jevi" haya ganado un concurso televisivo del que no sabía practicamente nada hasta ahora y sigo sin saber, ni me interesa, pero parece que anda revuelto todo el fandom metalero alrededor del fulano este, que ni siquiera se si canta bien o mal, unos en defensa de este pollo metalero, alzándolo como una especie de paladín que cambiará el rumbo musical de esta nación y otros en radical oposición salvaguardando el templo del metal a capa y espada contra los embates de las cadenas de televisión más punteras. Precisamente por mi ignorancia poco puedo decir al respecto, no negaré que siempre he disfrutado de mi afición al metal desde la posición más discreta que he conocido siempre, lejos de ambientes y medios tradicionalmente poco proclives al metal, sin pretender con esto adoptar una postura exclusivista (quizás esta tendencia un error muy gordo) sino que siempre he preferido buscar mi música a través de fuentes más fiables que una cadena de televisión con intereses bastante ajenos a los míos y puede que incluso a la propia música.

Quiero pensar que la música en general y el metal en particular se abre camino por sí solo y sin tanta parafernalia, así se explican casos como el de nuestros protagonistas de hoy, Sepultura, oriundos de una tierra que nunca ha alardeado de tradición metalera precisamente pero que no ha importado a los hermanos Cavalera y compañía para desarrollar un thrash metal a la altura de cualquier banda europea y/o americana que se les ocurra. Por supuesto, con aquello que distingue a las grandes bandas, es decir, su voz y estilo propios, optando en este caso por el thrash metal bruto y salvaje que tanto nos gusta pero sin dejar de apartar la mirada a los ritmos de su Brasil natal sin sonrojo alguno dando como resultado una ristra de grandes discos. Hoy rescatamos uno de mis preferidos y gran distintivo de la banda, el tremendo Chaos A.D. donde precisamente evolucionan del thrash más primitivo a un estilo con más groove y, si me lo permiten, más personal, con el añadido de algunos experimentos bastante curiosos.

En el afán de Sepultura por romper barreras podríamos decir que es muy natural que optaran por el metal ante tal efecto, pues la rabia y voracidad de este disco contienen una gran denuncia social bastante evidente a lo largo de sus surcos, tal es el caso del primer corte y auténtico himno de la banda Refuse/Resist, una maravilla thrashera que arrolla con la fuerza de sus timbales (cortesía del inmenso Igor Cavalera). Casi que también podemos catalogar como himno a la siguiente Territory, otro gran temazo cargado de fuerza gracias en parte a esos riffs graves, contundentes y densos de Andreas Kisser. Por cierto y discúlpenme la frikada, siempre he considerado que este tema iría de los primeros en la lista de canciones a escuchar mientras intento sobrevivir en caso de ataque de zombies. Cosas mías. Siguiendo el orden de este álbum, si temas como la estupenda Slave New World no te convencen del estilo thrashero de Sepultura, tranquilo que Amen lo hará con sus síncopas oscuras y potentes.

Decíamos antes que allá donde van Sepultura se llevan a Brasil con ellos y por supuesto no hablamos del Brasil de samba y futbol, sino más bien el Brasil del corazón del Amazonas, inspirador de Kaiowas, dedicado a la tribu del mismo nombre que prefirió perder la vida antes que perder la tierra que les nutre. Un tema tan personal que durante mucho tiempo se negaron a tocarlo en directo por no sonar como consideraban que debería, es decir, en el propio Amazonas donde se grabó.

Volvemos al thrash cafre y acelerado con Propaganda, precediendo a Biotech Is Godzilla, tema compuesto por Jello Biafra, de los Dead Kennedys. La velocidad se torna contundencia en Nomad y We Who Are Not As Others, tema este último con mucha esencia amazónica también para luego volver a escuchar a Max Cavalera desgañitarse contra las locuras en nombre de la religión en Manifest.

No todo es cafrerío y en ese aspecto The Hunt es toda una sorpresa, con ese sonido más cercano al heavy metal más convencional y que suena endemoniadamente bien, algo de agradecer antes del brochazo thrashero final que es Clenched Fist, brillante a la par que rabioso.


Disco que me atrevería y atrevo a calificar como obligatorio para los que les guste el metal de esta índole, aún a pesar de que en reediciones en cd vienen incluídas algunas remezclas de temas al estilo dance que, francamente, no es que le peguen. Existiendo discos como este, no me queda más que recomendarles que si quieren metal acudan a Sepultura, no a la tele.

Keep on rockin'!

1."Refuse/Resist"  

2."Territory"  

3."Slave New World"  

4."Amen"  

5."Kaiowas"  

6."Propaganda"  

7."Biotech Is Godzilla"  

8."Nomad"  

9."We Who Are Not as Others"  

10."Manifest"  

11."The Hunt" 

12."Clenched Fist"  






jueves, 20 de diciembre de 2012

DISCOS QUE TENGO TIRADOS POR AHÍ (XCVI): TEN YEARS AFTER - LIVE AT THE FILLMORE EAST 1970 (2001)



Ya nos han encendido las luces en el Fillmore East y el barrendero pasa la mopa mientras nos insinúa que nos larguemos con un mal disimulado carraspeo pero nos negamos a marcharnos porque ahora es el turno de Ten Years After, capitaneados por un caballero armado con una Gibson ES-335 roja con un símbolo de la paz y que responde por el nombre de Alvin Lee. Para ser un grupazo británico que hizo las américas triunfalmente, incluyendo coronación en Woodstock, que poco resuena su nombre hoy en día, y eso que Alvin Lee ha seguido trabajando incansablemente en diferentes proyectos, algunos incluyendo figuras nacionales de las séis cuerdas mientras que su hermano Ric Lee ha seguido adelante con el grupo original. En vez de llorar una enésima injusticia en estos mundos del rock vamos a recordar como corresponde a este grupo, verdaderos animales de directo demostrando su poder en uno de los mejores escenarios casi recién venidos de Woodstock, en el 70, aunque esta grabación no sería publicada hasta la friolera de 31 años después.

Aún así, la espera tuvo que merecer la pena, abriendo la función con ese glorioso riff de Love Like A Man y lucimiento de la banda incluído seguido de Good Morning Little Schoolgirl de Sonny Boy Williamson. Efectivamente, blues rock de alto octanaje es lo que vamos a hallar aquí, así que seguimos con un excelente Working On The Road, todo un respiro en cuanto a duración, y precisamente un respiro es lo que se toma Alvin para dejar a Ric que se pegue un mastodóntico solo de batería en la extensísima The Hobbit (efectivamente, ayer fui a verla y por eso me acordé de este disco. Muy recomendable, por cierto). La psicodelia viene de la mano de 50,000 Miles Beneath My Brain con todo ese desparrame instrumental aunque quizás hasta empequeñecido por un medley más parecido a una sinfonía blues rockera que marca el final de esta primera mitad del disco.

Un groove más pausado, volviéndose solemne, marca todo el Help Me, con excelente resultado, mientras que con I'm Going Home, cómo no, volvemos al blues rock más desmadrado y salvaje, con un Alvin al que solo le falta ponerse a pegar saltos. Un boogie frenético en el que Alvin parece dispuesto a no terminar hasta que la guitarra saque la lengua.

Volvemos a las versiones y no por sencillo es menos genial elegir temas del padrino Chuck Berry, pues bien, ahí tenemos dos soberbias y tenyearsafertizadas versiones de Sweet Little Sixteen y Roll Over Beethoven. 12 compases y rara vez más de tres acordes forman el sencillo patrón del blues y el rock, a partir de ahí cada maestrillo tiene su librillo: BB King optaba por los silencios, Albert Collins le arreaba unas ostias del quince a las cuerdas, Freddie King prefería cantar con sus solos...A Alvin Lee lo que se le da bien es entrar en estado berserker y eso es lo que hace en una colosal I Woke Up This Morning, sin perder fuelle para dar punto final con otro clásico ajeno pero digno de agradecer, el Spoonful de Willie Dixon.

Si Ten Years After nunca defrauda, no pierdan la oportunidad de disfrutar de ellos desatándose en directo. Pruebas del delito son la ya mencionaba actuación de Woodstock y otra el año posterior en la isla de Wight. En medio de esas dos encontramos esta y os puedo asegurar que no desmerece en absoluto.

Keep on rockin'!

TEN YEARS AFTER - LIVE AT THE FILLMORE EAST 1970


  1. "Love Like A Man" 
  2. "Good Morning Little Schoolgirl"
  3. "Working On The Road" 
  4. "The Hobbit" (Ric Lee) 
  5. "50,000 Miles Beneath My Brain"  
  6. "Skoobly-Oobley-Doobob"  / "I Can't Keep From Crying Sometimes"  / "Extension On One Chord" 



  1. "Help Me" 
  2. "I'm Going Home" 
  3. "Sweet Little Sixteen
  4. "Roll Over Beethoven
  5. "I Woke Up This Morning
  6. "Spoonful

miércoles, 19 de diciembre de 2012

DISCOS QUE TENGO TIRADOS POR AHÍ (XCV): LYNYRD SKYNYRD - STREET SURVIVORS (1977)



Soy un novelero y un poco "chufla" como decimos por aquí, lo admito, pero cuando tengo que coger el coche para ir a currar a centros penitenciarios, atravesando carreteras por las que muchas veces no pasa ni un alma pues el cuerpo me pide rock sureño y si puede ser del bueno. Debe ser ese olor a carretera y a historias chungas que destila este estilo pero también es verdad que ya he repetido muchas veces lo mucho que me gustan estas bandas que salieron del sur de los Estados Unidos repartiendo estopa, profanando su trasfondo hillbilly a golpe de guitarra eléctrica. Vamos, que lo que se ha venido a llamar rock sureño engloba nombres y grupos muy grandes y si ayer hablábamos del clan de los Allman hoy nos vamos a Florida para centrarnos en los Van Zant, Gaines y demás y es que pocas bandas son tan representativas de entre esa generación de grupos y tan geniales como Lynyrd Skynyrd.

Disco tan maldito como la propia banda, pues ese maldito accidente que truncó la carrera del grupo se llevó junto a Ronnie Van Zant junto con los dos hermanos Gaines, la corista Cassie y el guitarrista Steve, siendo Street Survivors el único disco que llegó a grabar. Que Street Survivors sea tan buen disco hace especialmente dolorosa esta tragedia, pues Gaines demuestra acoplarse a las mil maravillas con los más veteranos Allen Collins y Gary Rossington y una vez más tengo que reivindicar que esto, ladies and gentlemen, sí son tres guitarras, sonando cada una con su propia voz y personalidad, no esos conjuntos y reuniones que muchas veces nos quieren vender, vacas sagradas inclusive.

La verdad es que encuentro este Street Survivors más discreto cuando no, digámoslo, tradicional, que otros trabajos anteriores. Más country y con ese punto redneck tan cojonudo. No vamos a encontrar obras tan ampulosas como Free Bird pero tampoco es que haga falta, pues el disco se sostiene por sí solo y bien gracias a unos grandes temas y brillantes interpretaciones.

What's Your Name? empieza el álbum de manera divertida, apoyado por una simpática sección de vientos que lo hace un tema altamente disfrutable. Aún así, más me atrae That Smell, todo un clásico de la banda, inspirado en una mala experiencia consecuencia de la vida de excesos de la banda. Tema que, según leí una vez, es el que Joe Perry (Aerosmith) querría que sonara en su funeral. Y no es para menos, pues las guitarras de este tema son como para poner a esta copla en un altar.

Aparcamos el rock duro para volver al viejo garage del Tío Clarence y al olor la tarta de manzana de la Tía Gertie (la mejor del pueblo, por supuesto). A eso y, en definitiva, a la América de los Lynyrd Skynyrd es a lo que suena la grandísima One More Time, con un magistral estribillo potenciado aún más por esa sección de coros. Mucho cuidado con ese swing sureño de I Know A Little, que haría a Brian Setzer agachar las orejas y a todo aquel que se atreva a poner en dudas la habilidad tanto compositiva como guitarrera de los de Jacksonville.

Seguimos con más buenos temas como You Got That Right, con un gran slide como hilo conductor y una base contundente para dar paso a continuación a otra de las maravillas de estos sureños, la tremendísima I Never Dreamed, un tema de esos donde uno puede encontrar todo lo que define y es capaz de hacer esta banda. Y vaya guitarras, una vez más! Una buena manera de explicar qué es Lynyrd Skynyrd sin tirar de Free Bird o Sweet Home Alabama como ejemplo de himnos quizás más universales.

Si decimos que estos chicos siempre tienen un ojo puesto en sus raíces y tradiciones no lo decimos en balde, ahí tenemos un tributo a Merle Haggard en forma de la cachonda y etílica Honky Tonk Night Man (que aparece "reimaginada" en la edición extendida del disco con el título Jacksonville Kid). Y llegamos al final con un blues macarra y de la casa, ese genial recordatorio que es Ain't No Good Life. Falso final en cuanto que la edición que estoy escuchando ahora mismo incluye más temas como unas estumendas Geogia Peaches y Sweet Little Missie.

Aquí los tienen, Lynyrd Skynyrd, un grupo más grande que la vida que sigue a día de hoy en la brecha. No los he visto pero me dicen que mantienen ese rollo familliar que tanto le ha ayudado a ser la banda que es. Desde luego sí que seguirán siendo toda una punta de lanza en la excelentísima tradición de bandas de rock sureño y ya lo decimos unos cuantos colegas por aquí: sureñismo o muerte.

Keep on rockin'!

LYNYRD SKYNYRD - STREET SURVIVORS


  1. "What's Your Name
  2. "That Smell
  3. "One More Time" 
  4. "I Know a Little" 


  1. "You Got That Right
  2. "I Never Dreamed" 
  3. "Honky Tonk Night Time Man" 
  4. "Ain't No Good Life" 



lunes, 17 de diciembre de 2012

DISCOS QUE TENGO TIRADOS POR AHÍ (XCIV): THE ALLMAN BROTHERS BAND - AT FILLMORE EAST (1971)



Se avecinan días turbulentos, con sus festejos, sus excesos y en definitiva, el jolgorio propio de las fechas. También son días de amigos y familia y precisamente hoy vamos a recordar a una familia con la que siempre me lo he pasado muy bien y no me quiero imaginar como sería una nochebuena con este clan sureño. Gustoso cambiaría yo todas las zambombas de mi tierra por un concierto como el que se marcaron en el célebre Fillmore East neoyorquino en el 71, todo un conciertazo, épico de principio a fin. Y es que esa particular familia compuesta por los hermanos Allman (Duane y Gregg), Dickey Betts, Jaimoe Johanson, Berry Oakley y Butch Trucks (tío del grandísimo Derek Trucks) era algo muy, muy grande; siempre considerados vacas sagradas entre los grandes nombres del rock sureño con sobradas razones pese a no ser lo mismo que Lynyrd Skynyrd o Marshall Tucker Band pues, máxime en esta época, gustaban de dar rienda suelta a todo aquello que les volvía del revés, ya sea rock, blues, jazz y sonoridades exóticas varias lo que daba lugar a mastodónticas jams como las que nos obsequia este álbum en directo. Parece que la Rolling Stone lo tiene entre sus 500 mejores discos y en diversas publicaciones especializadas en guitarras también cantan sus alabanzas, de la primera cabecera lo mismo dan una de cal como de arena así que me ahorraré consideraciones pero sí me sumo a recomendarlo también desde la perspectiva de las séis cuerdas pues el festival de frases, riffs, solos y demás recursos de la dupla Dickey Betts y Duane Allman es ciertamente de quitarse el sombrero. No es que vayamos a descubrir ahora a dos guitarras de ese calibre pero por obvio que resulte es justo inclinar la cabeza ante estos dos monstruos, y ante el resto de la troupe, claro.

Entre versiones anda el juego al abrir el baile, algo tradicional y siempre plato de bueno gusto, por lo general, mas pocas veces han sonado tan cojonudamente clásicos de lujo como el Statesboro Blues de Blind Willie McTell, Done Something Wrong de Elmore James y, especialmente, Stormy Monday de T-Bone Walker, donde la pareja guitarrista se alza sobremanera hasta convertir esta y las otras dos anteriores en auténticos temas marca Allman. Una cosa bárbara.

Muchas ganas de juerga tienen que tener estos chicos que con un animado y divertido riff atacan otro tema ajeno dispuesto a volverse propio que es You Don't Love Me y sus casi 20 minutos de desmadre, con un Gregg soberbio. Hasta aquí, no está mal de versiones, ¿verdad? Pues ahora llega el turno de las composiciones propias pero sin abandonar la atmósfera de blues salvaje y enérgico, enlazando rápidamente con uno de esos temas propio de directos y único en cada uno de ellos, el homenaje a la ciudad que les vio nacer Hot 'Lanta, magnífico tema de principio a fin gracias a su hipnótico groove.

Mucho se comentaba sobre esas quedadas que hacía la banda en un cementerio de Atlanta para montar sus propias jam sessions, beberse unas birras y fumarse sus cosas ante la lápida de una misteriosa Elizabeth Reed como testigo. Así pues y con ese mismo espíritu de jam tenemos otro extenso y genial corte cuyo nombre no podía ser otro que In Memory Of Elizabeth Reed.

A estas alturas espero que no queden dudas sobre la calidad de los Allman pero si quedaran creo yo que bien las puede despejar el, en mi opinión, punto más álgido del directo y a la sazón cierre final del mismo y esta no es otra que Whipping Post, convertida también en clásico por antonomasia de la banda. Una vez más no puedo pensar en palabras que hagan justicia a esta maravilla también de gran duración (casi 25 minutos) que sigue sonando tan fresco como siempre y perfecta de principio a fin sin alterar una sola nota.

Estos son la familia Allman, unos tíos sureños que tocan muy, muy bien y ante vosotros tenéis un documento de genialidad ilimitada y, desgraciadamente, irrepetible, pues tampoco estuvieron exentos de tragedias (los desafortunados accidentes de Duane y Berry). Una maravilla de disco, una joya de directo.

Keep on rockin'!

THE ALLMAN BROTHERS BAND - AT FILLMORE EAST

1. Statesboro Blues
2. Done Somebody Wrong
3. Stormy Monday
4. You Don't Love Me
5. Hot 'Lanta
6. In Memory Of Elizabeth Reed
7. Whipping Post




jueves, 13 de diciembre de 2012

DISCOS QUE TENGO TIRADOS POR AHÍ (XCIII): RORY GALLAGHER - RORY GALLAGHER (1971)



El bueno de Rory, ¿qué puedo decir de él? Ha estado conmigo probablemente en más momentos de los que puedo recordar, no solo como eterno maestro rascacuerdas, estuvo conmigo cuando estuve currando un tiempecillo en un bar para sacarme unas perras y cómo olvidar aquella vez que me salvó de una bronca de borrachos allá en Irlanda volviendo incluso la situación a mi favor. Sumemos a todo esto que a día de hoy sigue muy presente en muchos momentos, pues pocos músicos de los que admiro profundamente son tan compartidos por mis cercanos, y así sigo disfrutando de Rory acompañado de cantidad de birras y bebedizos varios tanto en mi casa como fuera, solo o acompañado, con esa cotidianeidad. No se si es que Rory siempre aparece en el momento oportuno o que todo momento es bueno para Rory pero, en fin, Rory es así.

Y será por el momento del día que hoy optamos por su primer disco tras la buena trayectoria de Taste, un disco homónimo en el que la furia irlandesa que se irá desatando en trabajos venideros está más contenida a favor de una elegancia y clase inusitadas, y es que Mr. Gallagher era todo un señor. Blues rock de altísimo nivel con sus toques folkies, vamos, campo mil veces abonado por Gallagher pero en esta ocasión y como hemos dicho, en un plano mucho más discreto y no está nada mal, pues nos permite reconocer influencias suyas como Leadbelly o Albert King y, cómo no, Muddy Waters pero siempre gallagherizados, pues su strato (o aquello que pillara a mano, según el caso) suena a gloria.

Al contrario de lo que pueda parecer, el primer corte y uno de mis preferidos de la producción de Rory es Laundromat, tema que parece una enérgica jam, muy al estilo Taste, que conforma uno de los temas más salvajes del disco. Tanto me gusta que incluso quería haber llamado Laundromat a un grupo. Quizás algún día.

Como contrapunto, tenemos esa maravilla acústica que es Just The Smile, con un sonido americano magnífico. Un tema bien acompañado por la siguiente I Fall Apart, melancólico como él solo y con olor a bourbon y miserias; un estupendo blues cuya calma queda hecha añicos por un solo desgarradoramente épico. A continuación vemos a Rory mostrarse devoto de Robert Johnson y del rey del skiffle Lonnie Donegan con otra joya acústica llamada Wave Myself Goodbye, adornada por el fantástico piano de Vincent Crane.

Hands Up es el retorno a la vertiente rockera y por lo tanto no defrauda sino todo lo contrario. Como no podía ser de otra manera, tema que Rory vuelve a coronar con otro magnífico solo, en esta ocasión incluso con un punto jazzero estupendo. Sinner Boy es otro de los temas más sobresalientes del disco y no son palabras vacías pues lo considero uno de los temas definitivos de Gallagher, quizás con todos los elementos más puramente Rory y, por supuesto, ese magistral uso del slide. De esta misma manera, la posterior For The Last Time me parece una de las obras cumbre del Rory más discreto e incluso sofisticado; el tema bien podría ser instrumental pues la guitarra habla sola.

Un poco de country en It's You, un tema bastante divertido y ejemplo de otra de las diversas inclinaciones de Rory, haciendo sonar su stratocaster como si una pedal steel guitar fuese. Ahora vuelve el piano y la guitarra acústica en I'm Not Surprised y si en el primer asalto la combinación cumplió, aquí no va a ser menos, dando forma a un tema tremendo y muy honesto. Y terminamos con otro alarde de genialidad: Can't Believe It's True, a la sazón el tema más extenso del álbum y donde vuelca todo el groove hasta convertirse en una impresionante jam con saxofón de fondo (interpretado por el propio Rory). Un más que dignísimo broche final mejorado, si me apuran, en su versión remasterizada, la cual incluye dos rendiciones de lujo a sendos bluesmen de categoría: Muddy Waters (Gipsy Woman) y Otis Rush (It Takes Time).

Os prometo que no he podido evitar tanto referirme al gran Rory Gallagher como Rory pero, qué quieren que les diga, tanto tiempo con él rondando cerca supongo que me permite tomarme ciertas licencias de familiaridad. Imagino que a la mayoría que lee estas líneas poco o nada tengo que decir al respecto pero poner un poco de Rory en la vida de cada uno estoy seguro de que mejora las cosas. Háganme caso, yo estoy seguro.

Keep on rockin'!

RORY GALLAGHER - RORY GALLAGHER


  1. "Laundromat" 
  2. "Just the Smile" 
  3. "I Fall Apart" 
  4. "Wave Myself Goodbye" 
  5. "Hands Up" 
  6. "Sinner Boy" 
  7. "For the Last Time" 
  8. "It's You" 
  9. "I'm Not Surprised" 
  10. "Can't Believe It's True" 







martes, 11 de diciembre de 2012

DISCOS QUE TENGO TIRADOS POR AHÍ (XCII): AEROSMITH - TOYS IN THE ATTIC (1975)



Malditos Aerosmith. La historia de los grupos que pudieron tenerlo todo y ser lo más grande pero se chocaron contra los escollos que ellos mismos pusieron en su camino es tan larga y antigua como el propio rock y el caso de Aerosmith es similar y al mismo tiempo diferente, pues es una banda que ha demostrado varias veces ser las dos caras de la misma moneda, capaz de ser una de las bandas de rock más auténticas y cojonudas del planeta y a la vez coronarse como adalides del lado más asqueroso del rock, pasando de los devaneos con lo comercial, algo que no forzosamente tiene que ser siempre malo, a auténticos momentos de vergüenza ajena a través de toda una vida de escándolos, sordidez y muchas, muchas drogas (y en cantidad). Pero, en fin, Aerosmith juegan en otra liga y no seré yo quien se erija como juez mas, claramente, sí tengo claro quienes son los Aerosmith por los que siento devoción y cuales los que me repugnan y evidentemente hoy vamos a ensalzar a los primeros, con un maravilloso disco como es este Toys In The Attic que presenta a unos Aerosmith en plenas facultades a base de hard rock por derecho orgulloso de sus raíces blueseras con un ojo puesto en Jagger y Richards pero al mismo con una enorme actitud.

Al igual que sucede con sus padrinos británicos, también aquí encontramos dos ejes en forma de cantante y guitarrista, los simpar e inclasificables Toxic Twins: Steven Tyler y Joe Perry. Aunque sería una injusticia olvidar al resto de su formación más clásica, compuesta por Brad Whitford a las guitarras, tanto acompañando a Fuckin' Perry como luciéndose cuando toca; Tom Hamilton al bajo y Joey Kramer a la batería.

La propia Toys In The Attic es la elegida para abrir el disco homónimo amén de una presentación cojonuda, gran tema hard-rockero con excelente riff que pronto deja paso a Uncle Salty, un cachondo y divertido blues pero con una temática amarga y desagradable. Todo esto está bien y desde luego es Aerosmith, el Aerosmith que me gusta. Pero Aerosmith también es macarreo y ahí tenemos Adam's Apple, vaya un temazo más grande y qué bien huele ese aroma stoniano.

¿Qué decir de Walk This Way? Mencionar que tal vez fuera el tema que les abriera las puertas de la MTV a través de versiones y usos varios sería mencionar la anécdota y no hacer justicia a este magistral tema rockero que siempre hará que Tyler y Perry puedan andar con la cabeza bien alta. Y el hecho de que estuviera inspirado en una gran escena de esa magnífica película de Mel Brooks que es El Jovencito Frankenstein les concede más puntos por mi parte.

Poco os puedo descubrir si afirmo que Joe Perry es un verdadero animal de la Les Paul y hasta aquí no hemos hecho más que dar razones de peso, pues más de lo mismo tenemos en la versión Big Ten Inch Record, donde puede lucirse a su antojo. Casi lo mismo ocurre en otro clásico de los de Boston, Sweet Emotion, de atmósfera más relajada y casi psicodélica que se rompe como el cristal con un soberbio riff central.

No More No More me recuerda mucho y para bien a The Who, quienes a buen seguro sonarían hasta la nausea en los tocadiscos de los de Boston y, claro, con tal referente así sale luego un tema tan estupendo como este. La sorpresa nos la llevamos a continuación con Round And Round, un tema denso y contundente con unas guitarras pantanosas anticipándose en muchos años a toda la movida stoner y de tremenda manera.

Atentos y ojo al parche con el tema final, You See Me Crying, quizás como balada sea el primer paso hacia el muy comercial camino que acabarían tomando paulatinamente pero es un señor tema de los pies a la cabeza y qué quieren que les diga, en opinión de este humilde servidor muy, muy superior a la ristra de moñadas que firmarían en años venideros. Quizás sea por esas partes de piano y secciones orquestales que me parecen magistrales.

Con todo esto, comprenderéis que más me jode que con maravillas como esta Tyler se dedique a hacer el payaso ante toda cámara o medio que le coja a mano y su grupo haya adquirido unas tonalidades grises que dan pena y no les sienta nada bien. A esta alturas uno no está para esperar milagros ni tampoco vamos a pedir lo imposible, pero aún podemos disfrutar con maravillas como esta. Malditos, malditos Aerosmith.

Keep on rockin'!


AEROSMITH - TOYS IN THE ATTIC

1."Toys in the Attic"  
2."Uncle Salty"  
3."Adam's Apple"  

4."Walk This Way"  
5."Big Ten Inch Record"  

1."Sweet Emotion"  

2."No More No More"  

3."Round and Round"  

4."You See Me Crying"  


viernes, 7 de diciembre de 2012

DISCOS QUE TENGO TIRADOS POR AHÍ (XCI): BLACK SABBATH - BLACK SABBATH (1970)



Tradicionalmente el puente de la Constitución inicia las navidades, fiestas de carácter sacro que yo aprovecho y espero para disfrutarlas a lo pagano. Por lo tanto, antes de que empiecen los fastos de solsticio de invierno buenrrollero y que termine el año, vamos a aprovechar un resquicio de siniestrez y oscuridad con  unos grandes, pero grandes de verdad, en su primer disco, posiblemente y con poco lugar a dudas el primer disco de heavy metal, así como quien dice. Pero es que hablamos de Black Sabbath, claro, y pocos en la sala habrán para negarle al césar lo que es del césar.

Este disco lleva acompañándome muchísimos años y a día de hoy no solo me sigue pareciendo una maravilla, que lo es, sino que sigo encontrando todo lo que cabría desear en un disco de rock y, si me apuran, de heavy metal. Y, sí, me sigue sonando tan fresco como siempre; combinar ese rock duro, blues, psicodelia y tendencia por lo oculto y terrorífico con el aliciente de ser todo un pionero hace que calificarlo como proto-heavy metal sea algo más injusto, siendo "obra maestra" una etiqueta más adecuada. Y aún me atrevo a decir más, a pesar de que a caballo pasado todo sean apuestas, todo este disco indica que es una banda que no solo estaba dispuesta sino que iba a ser algo grande sí o sí, como muestra el hecho de que se grabara prácticamente de un tirón.

La entrada, sin ir más lejos, es por todo lo grande. Hoy en día, con todo el camino allanado, quizás sea más fácil, e incluso resulta a veces artificial, todo este rollo siniestro y terrorífico, pero los condenados Sabbath dieron la primera nota con un temazo basado en el tritono que prohibiera la iglesia en la Edad Media (por satánico, of course) y con homenaje a Mario Bava y Boris Karloff incluído. Claro, hablamos del tema llamado como el propio disco y ellos mismos, Black Sabbath, que a la postre resulta toda una bofetada llena de mala leche a la cara de buen rollo de las generaciones anteriores. Aún así no todo va a ser Satán persiguiendo almas torturadas, pues a continuación tenemos un tema que se inspira en el propio Gandalf de Tolkien, The Wizard, un divertido blues-rock con unas muy reconocibles líneas de armónica.

La pluma de Geezer Butler se niega a abandonar la fantasía, territorio por el que se mueve bastante bien, y muestra de ello es su saludo al gran H.P. Lovecraft en Behind The Wall Of Sleep, un tema con toda la fuerza que puede tener un riff de Iommi, que no es poco; y acto seguido otra vez Satán vuelve a hablar a través de los labios de Ozzy (¿alguna vez ha dejado de hacerlo?) para hablarnos de su particular historia de "chico-conoce-a-chica" de N.I.B. un cojonudísimo tema y todo un trabajo el que se pega Tony. También hay hueco en este debut para alguna versión, aunque también sobre seres malvados, claro. En este caso es Evil Woman, de los poco conocidos Crow, un gran tema hard-rockero.

Sleeping Village es un tema con muchos de los rasgos definitorios de los Sabbath: los riffs de Iommi, los platos jazzísticos de Bill Ward en contraste con sus contundentes parches metaleros...por ello y aunque no sea el más popular no lo puedo considerar un tema menor. Algo de lo mismo ocurre con Warning, tema-jam también apropiado de otro grupo, en este caso unos tales Retaliation donde militaba el mismísimo Aynsley Dunbar. Lo que sí es una lástima es que el cd que escucho ahora mismo no tiene el Wicked World que sí tenía mi cassette grabado de hace años. No es que sea la quintaesencia de Black Sabbath ni lo pretende pero es un tema que me parece genial, tan denso como el stoner del que se harían padrinos y toda una delicia sabbathiana.

Aunque es un disco que pocas palabras y ninguna presentación necesite, es un auténtico big bang rockero que, ni que decir tiene, debe coronar las colecciones y equipos de música de todo aquel que tenga un mínimo de afición por el asunto. Que el Señor de las Moscas y Soberano de lo Oscuro se lleve a quien no, y a los demás, que tengáis un negro, negro sabbath. Y sangriento, claro.

Keep on rockin'!

BLACK SABBATH - BLACK SABBATH

1."Black Sabbath"  
2."The Wizard"  
3."Behind the Wall of Sleep"  
4."N.I.B."  
5."Evil Woman
6."Sleeping Village"  
7."Warning" 









martes, 4 de diciembre de 2012

DISCOS QUE TENGO TIRADOS POR AHÍ (XC): JOHNNY CASH - AT FOLSOM PRISON (1968)



Este es el tercer año que llevo currando en prisiones, pues parte de mi trabajo de profesor lo llevo entre rejas. Como todos los cursos, cada año es una novedad pero este año quizás la más importante para mi es que este año me desplazo con vehículo propio, aunque aún sea un novato sobre ruedas. Así pues, conducir todavía es para mi una suerte de aventura, al igual que el empezar un nuevo curso en el talego, y qué mejor manera de empezar un curso allí que con Johnny Cash, gran maestro de ceremonias carcelario, como copiloto para ir preparándose. Así pues, mientras conducía he ido escuchando este directo que grabara en la prisión de Folsom, aquella que inspirara aquel himno suyo y donde tenía claro que alguna vez tocaría, y de qué manera.

Partamos de la base de que Johnny era uno de esos tíos demasiado grandes para este mundo y discos como este así lo demuestran, con un público presidiario enfervorecido aplaudiendo y jaleando, aunque respetando con solemne silencio cuando requería la actuación de Mr. Cash, con su selecta troupe en lo alto de ese escenario algo desvencijado junto a distinguidas presencias como su señora June Carter y el no menos legendario Carl Perkins a las seis cuerdas. Johnny está como un auténtico pez en el agua, aunque no deje de pedir vasos del líquido elemento y riendo con su público tan natural como siempre. Debo admitir, aún así, una comparación algo inevitable y como muchas, odiosa; pues me sigue resultando superior aquel otro directo que grabara en San Quentin y que ya comentamos por aquí hace ya un año aproximadamente. Esta actuación es más conservadora e incluso discreta pero no deja de ser casi una hora de Johnny Cash al 100%

Ya de entrada ataca con el magistral Folsom Prison Blues, muy del gusto de tan selecto público y no merece menos, así que a partir de ahí nos encontraremos con breves temas cargados de nostalgia, pérdidas, historias duras y, en general, tristeza con una máscara de macarrismo: I Still Miss Someone, The Long Black Veil, Send A Picture Of Mother... sin abandonar esos temas gamberros como el gran Cocaine Blues o ese relato de un condenado narrando sus últimos 25 minutos de vida en 25 Minutes To Go, sin olvidarme de una de mis preferidas y de las mejores y más cachondas canciones de desamor de la historia: Flushed From The Bathroom Of Your Heart, cuya letra recomiendo que echen un vistazo y si no me creen juzguen ustedes a partir del descojone de los presidiarios.

Además del folk americano que vemos en temas como Joe Bean o un Dark As A Dungeon de Merle Travis seguimos encontrando auténticos clásicos de Cash como The Legend Of John Henry's Hammer y Jackson, con una gran interpretación por parte del matrimonio Cash-Carter y, como no, uno de mis temas talegueros preferidos y una auténtica gozada, I Got Stripes.

Me consta que los presos que he conocido aprecian todo este tipo de movidas más o menos extraordinarias pero no hace falta estar entre rejas para disfrutar de esta maravilla del country, y es que Johnny nunca falla.

Keep on rockin'!


JOHNNY CASH - AT FOLSOM PRISON

1."Folsom Prison Blues"  

2."Busted"  

3."Dark as a Dungeon"  

4."I Still Miss Someone"  

5."Cocaine Blues"  

6."25 Minutes to Go"  

7."Orange Blossom Special"  

8."The Long Black Veil"  

9."Send a Picture of Mother"  

10."The Wall"  

11."Dirty Old Egg-Suckin' Dog"  

12."Flushed From the Bathroom of Your Heart"  

13."Joe Bean"  

14."Jackson(with June Carter)

15."Give My Love to Rose" (with June Carter)

16."I Got Stripes"  

17."The Legend of John Henry's Hammer"  

18."Green, Green Grass of Home"  

19."Greystone Chapel"